Mujer 1, de Nina Bebout

Gioconda Belli (1948) es una de las grandes voces de la literatura nicaragüense. Partícipe de la revolución sandinista, en su poesía se revela ese mismo espíritu insurrecto en su incesante búsqueda de la identidad femenina y el encuentro con la conciencia social. El goce de ser mujer, el erotismo, el compromiso político y vital son sus principales temas.

CREDO

Creo que mi poesía nace de la felicidad,
de esa conciencia dolorosa de ser feliz
sin motivo, ser feliz como una necesidad
intransigente que no admite los momentos
de tristeza, que exige la risa, el sol,
a lo largo de todos los días, en los ratos
más inesperados porque para escribir
necesito ser feliz, sentirme como un
caballo relinchón, explotar las palabras
como malinchazos, llenarme de maleza cos-
quillosa hasta el borde, hasta que se me
salga el alma, el goce que me hace poeta.

Sobre la grama, 1974.

A BORBOTONES

A borbotones
estoy creando
palabras.

Me retuerzo en dolores
de parto.

Cada poema
es mi carne
y mi sangre.

No quiero quedarme
sin nada.

No dejaré que salga
la placenta.

Sobre la grama, 1974.

DEL QUÉ HACER CON ESTOS POEMAS

Pienso que juntaré mis poemas,
agarrados como una fila de huracanes
y haré un libro desafiante y bello para vos.
Un libro donde estaremos felices
o ariscos como gatos discutiendo,
un libro que flote en el tiempo de tu tiempo
y que podás enseñar a tus nietos
y decirles:

«Miren cómo me amó esta mujer»,
con orgullo de macho idolatrado.

Truenos y arco iris, 1982.

CREACIÓN

La soledad del escritor
La fragua lenta, íngrima, de la palabra
–el peligro y sus chispas–

El enfrentamiento cotidiano con el cansancio
y las distracciones
–el país que ando siempre colgado en la garganta
con sus campanarios–

Soledad del alma que añora ruidos lejanos
y la soledad del escritor
la de siempre
la de a diario
la pantalla encendida ausente y azul como un cielo sin estrellas,
un Universo donde soy la única Diosa posible.

Mi íntima multitud, 2003.

LAS PALABRAS

Envolviéndome con sus anillos
bajando serpientes por mi pelo
las palabras
encuentran a su paso las imágenes
la vida impresa de mi sangre:
Se la beben, me absorben, me dominan,
se enroscan en mi piel para estrujarme
nada existe de mí que no sean ellas
vividoras feroces de mi plasma.
En mi centro plantan de nuevo el árbol
lo cargan de manzanas, de mangos, de cerezas
Callan a Dios
prometen revelarme
la belleza que busco
y que me evade.

Fuego soy, apartado y espada puesta lejos, 2007.

REUNIÓN DE POETAS EN GRANADA

Reunión de poetas en Granada
La bandada de pájaros desciende sobre la ciudad
En las plazas la palabra se desnuda como una flor al amanecer
Díganme poetas del mundo
¿Cuál es el sentido de la vida?

He vivido arroyos de años
aguas vivas y ardientes
que me han dejado la piel suave como piedra pulida
El refugio de la poesía
ha sido para mí como la capa invisible de Harry Potter
para moverme entre los escenarios del mundo
con cara de ausente
o de mujer enamorada
Pero díganme, poetas,
en esta sucesión de años-volcán que hemos vivido
cuando la carroña nos rodea y nos acecha
no es acaso la lira un instrumento tenue y anacrónico
¿no somos acaso sobrevivientes del soñar,
ilusos románticos creyendo en los conejos de los magos?

¿Qué mundo es éste que hemos creado
descalabrado y desapalabrado
un mundo lleno de boquetes
por donde caen los indefensos
abismos que se abren como si la tierra buena
se hubiese tornado en fiera
y abriera sus fauces constantes
para tragarnos?

¿Cómo podrá una sucesión de palabras
de meditaciones
de versos enhebrados con fina aguja
crear la red para salvar a los incautos?

¿Qué tiempo es éste donde todos se oyen
mientras nadie escucha?

Tiempo de correos electrónicos de celulares de computadoras
de voces que van y vienen sin respeto a la geografía
el mundo como un pañuelo
–sólo que un pañuelo ensangrentado?

He sido la mujer de esperanzas
de viva voz de pasiones tremendas
de impulsos sin freno
A todas partes me he aventado
con los botones de la blusa abiertos
para que el viento me enseñara sus secretos
pero en el medio del camino de la vida
no hay Virgilio que me lleve a conocer
lo que yace en el submundo de los corazones
y he dejado de pensar que sé leer los augurios en las cartas
porque nada es ya predecible, ni calculable,
y lo que antes no tenía precio
se vende ahora en los pasillos,
mercadería que se anuncia
sin vergüenza y a gritos

Díganme poetas, pájaros que cayeron del cielo aquí en Granada
¿Dónde vamos con toda esta poesía a cuestas?
¿Cuál es el sentido de la vida?

Fuego soy, apartado y espada puesta lejos, 2007.