La poesía de Waldo Leyva (Cuba, 1943) presenta dos temas centrales: la nostalgia y el sueño de la utopía. Se proyecta por tanto hacia un pasado irremediablemente perdido y hacia un futuro por construir. Su lenguaje es depurado y preciso.
UN POEMA ES SIEMPRE LA CARENCIA DE ALGO…
Un poema es siempre la carencia de algo.
No hay personaje ajeno,
todos descubren las claves ocultas del que escribe.
Sólo el poeta sabe el daño que ocasiona cada verso
pero sigue buscando la palabra.
El rasguño en la piedra, 1995.
AUTODISCURSO
Nadie puede pedirme que me calle,
que me muerda la lengua,
mi silencio es peor que las palabras.
Dejadme hablar,
dejadme que me saque del pecho cada grito.
Que a nadie resulte inconveniente lo que digo.
Hay palabras como sueño
utopía
porvenir
que cuando caen,
se te vuelven veneno en la garganta
y te amargan la lengua,
y te rompen el pecho.
Aunque quede vacío para siempre
nadie puede pedirme que me calle.
Memoria del porvenir, 1999.