La poesía de Francisco Gálvez (Córdoba, 1945) profundiza en la naturaleza transitoria de la realidad: pretende revelar aquello que se oculta tras la apariencia de uniformidad con que esa realidad se viste.
SOBRE LA PROPIA OBRA
Como hoja deshojada en el olvido,
como agua que escapa y humedece,
nada más allá del silencio ya escrito
en las páginas en blanco de la poesía.
Cada obra tiene su signo y a veces
su pasión insustituible.
Santuario, 1986.
POÉTICA
Al final de la casa
hay una puerta entreabierta,
donde todo está por hacer
y lo que no se ve ni se oye
tiene el sentido de lo impreciso,
de realidad a medias
presentida y misteriosa.
Una puerta entreabierta
para manos diversas
que se acomodan a la mirada
de quien la abra.
El paseante, 2005.