El zamorano Juan Nicasio Gallego (1777-1853) es uno de los representantes de la poesía civil liberal de origen ilustrado, clave en la transición entre Neoclasicismo y Romanticismo.
A MI CARAMILLO
Rómpase ya la mísera flautilla,
que entonando de amor tiernos cantares,
si no aplacó su voz soberbios mares,
supo alegrar los campos de Castilla.
En son festivo el Tormes a su orilla
sonar la oyó sin sustos ni pesares,
y hora escucha sus quejas Manzanares,
y el llanto ve correr por mi mejilla.
Mas si cantar de aquélla solo sabe,
que ya no osa nombrar el labio mío,
la belleza gentil, los garzos ojos;
como mi dicha y mi esperanza, acabe,
y envueltos con mis lágrimas el río
lance al Tajo profundo sus despojos.
1808. Obras poéticas, 1854.
RECETA
Toma dos versos de cinco sílabas,
de aquellos mismos que el buen Iriarte
hizo en su fábula lagartijera.
Forma de entrambos un solo verso,
y esto repítelo según te plazca.
Mezcla si quieres, que es fácil cosa,
algún esdrújulo de cuando en cuando;
con esto sólo, sin más fatiga,
harás a cientos versos magníficos,
como éstos míos que estás leyendo.
Así algún día los sabios todos,
los Hermosillas del siglo próximo,
darán elogios al divino invento,
ora diciendo que son hexámetros
o asclepiadeos, ora que aumentas
con nueva cuerda la patria lira,
no hallando en Córdoba laurel bastante
con que enramarte las doctas sienes.
1840. Obras poéticas, 1854.