Pequeña escena pasional, de Matias Quetglas

La poesía del gaditano Fernando Quiñones (1931-1998) se caracteriza por un cuidado prosaísmo narrativo, continuas referencias culturales, un erotismo desenfadado, a veces crudísimo, y una síntesis de bronco andalucismo y refinamiento léxico.

LOS POETAS

También tú, curtidor,
y tú, hermoso patán, arrancándole
al invierno terrones, empujando
en agosto el plostellum. Y tú,
herrero entre sombríos fulgores,
o tú, inocente
borracho sin oficio.
También vosotros sin saberlo
conocisteis alguna vez
no la mayor: la única gloria del poeta:
cuando en el prado, la curtiduría,
la taberna, la fragua, se os llegaron
casualmente a la boca aquellas tres, cuatro palabras
que no se habían juntado antes
o nunca habían sonado de aquel modo,
y que dejaban dicho algo,
sencillo acaso como ellas,
pero tan verdadero, tan nuevo y tan antiguo
que os suspendió y enmudeció un instante,
como a algunos de los que os escuchaban.

Las crónicas de Hispania, 1985.