Sin título, de Cirilo Martínez Novillo

La poesía del zaragozano Ildefonso Manuel Gil (1912-2003), poeta adscrito al grupo de la revista Hora de España, expresa, en versos sencillos, inquietudes sociales y existenciales.

POÉTICA

Busqué siempre en mis versos
un humano temblor, aunque sabía
que los mármoles tersos,
pura geometría,
resisten más el peso de los días.

Pero yo soy apenas
esta hora que vivo intensamente;
el río de mis venas
se aleja de su fuente
y se sume del tiempo en la corriente.

Canto la pesadumbre
del doliente vivir que es mi destino,
la loca incertidumbre
de ir abriendo camino
en soledad, a oscuras y sin tino.

En mi voz, al hablaros,
carga el dolor la fuerza de su acento,
y sólo he de dejaros
esta angustia que siento
en ritmo entrecortado de lamentos.

El hombre, viva llama,
que de su propio fuego es abrasado,
espera, sufre, clama
y corre desolado
por el terror ceñido y acosado.

El ángel irascible
sembrador de los odios, inclemente,
en la tierra impasible
derrama su simiente,
que los hombres cultivan ciegamente.

Agónico presencio
el acoso del hombre perseguido;
escucho en el silencio
su confuso gemido
de dios mugiente o animal herido.

Mi verso es así el grito
que en la más honda entraña me ha brotado.
Más que en frío granito,
quiero el nombre grabado
al pie de un verso en sangre sustentado.

Poemas de dolor antiguo, 1945.

COMO SALIENDO DE SU NOCHE OSCURA…

Como saliendo de su noche oscura,
de su tunel de sangre adormecida,
sacude las entrañas embestida
de ciego toro, poesía pura.
Liberada en la red de la palabra,
vuelo de raíces, ala, luz,
pulso invisible de milagro labra
su corona y su cruz.

En el goce dolido de sorpresa,
funámbulo en el borde de su abismo,
cumple el poeta su destino en esa
arrogante humildad de ser él mismo
mina, minero, pedernal, estrella,
silencio, canto, instante, eternidad,
sorpresa jubilosa, honda querella,
encadenada libertad.

Poemas del tiempo y del poema, 1973.