Jorge Urrutia

Axis Mundi XIV, de Vicente Pascual

La poesía de Jorge Urrutia (Madrid, 1945) reflexiona acerca de las relaciones entre vida y literatura, con un lenguaje denso, cuajado de símbolos.

FAENA DE LA ESCRITURA

L’esser poeti non è un vanto.
É solo un vizio di natura.
Un peso che s’ingroppa
con paura¹
.
EUGENIO MONTALE

El equilibrio busca del poema
el peso del acento
que al verso balancea y lo sostiene
sobre el acantilado abierto del sentido.

No sabe si decir, aunque lo diga
con la seguridad que da lo ineludible,
temeroso del miedo a que lo pleno
desborde por entero su vacío.

Respira. Firme un pie y sobre el sueño
apoyándose el otro.
Te contempla seguro,
esperando a que llegues a invadirlo.

Abierto su capote te recibe
transformando tu empuje en transcurrir sereno.

¹ Ser poeta no es un mérito. / Es sólo un vicio de carácter. / Un peso que se carga / con miedo.

Una pronunciación desconocida, 2001.


Rafael Arráiz Lucca

Colosa (de la alegoría), de José Vivenes

La poesía del venezolano Rafael Arráiz Lucca (1959), de marcado carácter autobiográfico y testimonial, se pregunta por el destino del hombre, el paso de los días y la pérdida de la inocencia.

LA POÉSIE

Como una voz que cubre
los espacios más amplios
sin que nadie la escuche.

Como las muchas cartas selladas
dirigidas a una actriz
que ha fallecido en secreto.

Como el inútil soplo de Dios
sobre una costilla falsa.

Litoral, 1991.


Jesús Hilario Tundidor

Flor blanca, de Joan Hernández Pijoan

Para Jesús Hilario Tundidor (Zamora, 1935), escribir poesía es “apasionar la inteligencia y clarificar la emoción del conocimiento dentro de una experiencia personal profunda, que se expresa en los territorios del poema por medio de los automatismos preconscientes del lenguaje”.

POÉTICA

Miro el espacio azul. Me crecen alas
de oro. Paz de oro, espuma silenciosa
viene hasta el corazón. En la espaciosa
inmensidad, en las enormes salas

del aire crece, extiende ya sus galas
el sueño. No es sueño. Ser. No es ser. ¿Fosa
será de mi deseo? No, no hay cosa
más lejos de la muerte que estas alas.

Hálito del dolor que se origina
desde un dentro de sol y permanencia
como los robles, más, como la encina.

Es un instante. ¿Suficiente? Anhelo,
ya hermandad absoluta, la existencia.
Todo es un vuelo y más, es más que un vuelo.

En voz baja, 1969.


Santiago Sylvester

Jugo de naranja, de Verónica García Lao

Dentro de la rica tradición de poesía intelectual de su país, cabe situar la obra del argentino Santiago Sylvester (1942). En sus versos, investiga los entresijos de la vida cotidiana y los tópicos del lenguaje.

LAS PALABRAS DIARIAS

La cuestión es entender la intención
de las palabras que usamos empecinadamente:
las que grita el diarero,
las que el lechero murmura entre los vapores
del amanecer,
las que giran obsesivamente en la cabeza del loco,
las que el cartero lleva sin saberlo en su bolsa.

Son pocas las palabras que sostienen la realidad
y que podrían destruirla con su sola ausencia;
son las que usamos para explicar nuestra porción del mundo,
las palabras de nuestra convicción,
de nuestra íntima apuesta.

La cuestión es entender la intención de las palabras,
esa armonía sin énfasis que se parece al destino.

Entreacto, 1990.


Louise Labé

Dama en el baño, de François Clouet

Louise Labé (1525-1566), conocida con el sobrenombre de la Belle Cordière, es una de las más importantes figuras de la lírica renacentista francesa. Ovidio y Petrarca son sus principales modelos. Su obra consta de un Debate entre la locura y el amor, tres Elegías y veinticuatro Sonetos.

OH TÚ LAÚD, AMIGO EN DESVENTURA…

Oh tú laúd, amigo en desventura,
de mis suspiros, prueba fehaciente,
de mis afanes, dúctil confidente,
a menudo rimaste mi incordura:

y tanto el llanto urgía tu mesura,
que apenas en la boca un canto ardiente,
lo tornabas endecha de repente,
tono mayor trocado en amargura.

Pues de insistir, celoso, en lo contrario,
al silencio me obligas arbitrario:
mas viendo a mi ternura suspirar,

dando cabida a tristes letanías:
al goce de tormentos me ceñías,
y a dulce mal, un dulce fin buscar.

Sonetos, XII, 1555. Traducción de María Negroni.